Beneficios del higo para la salud
¿Sabías que los higos también son conocidos como la fruta de los filósofos? Alabados por personajes tan ilustres como Platón, las propiedades y beneficios de los higos son conocidos desde tiempos muy remotos.
La antigua Grecia fue una de las culturas que más explotó los innumerables efectos positivos de los higos para la salud. Desde una fuente natural de energía hasta un remedio para la fiebre, los higos eran muy apreciados por sus propiedades nutricionales y sus connotaciones medicinales.
El paso de los años solo ha hecho que acrecentar las virtudes de esta sabrosa fruta con la que endulzar los meses más cálidos del año. Si todavía no te has lanzado a probarla, espera a conocer sus sorprendentes beneficios para el organismo. ¡Se convertirá en una fruta indispensable en tu dieta!
Favorece los procesos digestivos
La fibra es uno de los componentes más importantes de los higos. De hecho, aparece en cantidades superiores a los de otras frutas como la piña, las uvas, el melón o el pomelo.
Tal es así que, el higo, es considerado un laxante natural, lo que explica que se haya empleado durante años como remedio casero para tratar problemas digestivos, como el estreñimiento. La fibra soluble presente en los higos ayuda a ablandar las heces, favoreciendo su paso por el tracto intestinal y facilitando las evacuaciones.
Varios estudios han demostrado la capacidad de los higos de reducir los efectos del estreñimiento, como el dolor y la hinchazón. Además de ello, contribuye a prevenir enfermedades como el cáncer de colon.
Fuente de vitaminas y minerales
Entre los minerales que encontramos presentes en los higos, cabe destacar el calcio, que protege la estructura musculo-esquelética; el potasio, que contribuye al buen funcionamiento de los músculos en compañía del magnesio, y el hierro, cuya cantidad permite mantener los niveles adecuados de este mineral en el cuerpo.
No podemos olvidarnos de la presencia de aminoácidos esenciales como la niacina, la tiamina y la riboflamina, necesarios para el correcto desarrollo de funciones básicas del organismo.
Entre las vitaminas, abundan las del grupo B, entre las que encontramos B1, B2 y B3. Además de estas, el higo es rico en potentes vitaminas antioxidantes como la A, E y K. La presencia de estas vitaminas en el higo, conduce al siguiente beneficio de nuestra lista.
Cuida la piel
Además de las vitaminas mencionadas, el higo contiene betacarotenos, que contribuye a que el organismo se beneficie de la ingesta de la vitamina A.
La unión de los diferentes componentes mantiene la salud de la piel, reduciendo los daños producidos por agentes externos y combatiendo la acción de los radicales libres, principales responsables del envejecimiento prematuro.
Además de ello, los higos muestran efectos beneficiosos, sobre todo, en las pieles que sufren de sequedad o picazón, como consecuencia de reacciones alérgicas. Por su parte, el extracto de higo, en combinación con el de otras frutas, minimiza la descomposición de colágeno, tan importante para la elasticidad de la piel, mejorando la apariencia de las arrugas.
Favorece la salud cardiovascular
La fibra soluble, que tanto favorece el aparato digestivo, también interviene en el cuidado del sistema cardiovascular, ya que ayuda a controlar los niveles de colesterol y de glucosa en sangre.
En este sentido, la pectina, es la responsable de minimizar los niveles de colesterol malo en sangre, combatiendo el riesgo de sufrir ataques cardíacos o desarrollar hipertensión arterial. Los higos contribuyen a reducir la presión arterial, mejorando la salud vascular.
Mantiene el sistema nervioso en óptimas condiciones
Gracias a la presencia de minerales, el higo ayuda a mantener el funcionamiento normal de los músculos y nervios, al tiempo que refuerza el sistema inmunitario. La combinación del calcio y el magnesio, presente en el higo, favorece al crecimiento de los huesos y a que se mantengan fuertes.
El potasio, por su parte, favorece la función de los nervios y permite el correcto paso de los nutrientes a las células. Además, también interviene en la contracción de los músculos y mantiene el ritmo cardíaco constante.
Ayudan a mantenerte en forma
Estamos ante uno de los beneficios de comer higos en ayunas. La ingesta de dos o tres piezas de esta fruta antes de la comida reduce el apetito. Además, gracias a sus azúcares naturales, ayuda a reemplazar los postres y los antojos de dulce.
Al contrario de lo que pueda parecer por su sabor dulce y jugoso, el higo no es especialmente calórico. Pero, no solo eso, gracias a la fibra, genera sensación de saciedad y un ligero efecto laxante.
Fuente de energía
La presencia de azúcares naturales en su composición, ayuda a incrementar los niveles de energía en el organismo. Es, por ello, que el consumo de higo está especialmente recomendado en deportistas.
Por otro lado, su alto contenido en agua (75%) y de hidratos de carbono (25%), la mayoría en forma de azúcares naturales, lo convierten en una fruta reconstituyente, ideal para ingerir después de la práctica deportiva.
Ahora bien, otro de los beneficios de comer higos en ayunas es que ayuda a combatir el cansancio. Levantarte por la mañana y tomar un par de higos es sinónimo de empezar el día lleno de energía y vitalidad.
Previene la degeneración macular
La degeneración macular es una enfermedad asociada al envejecimiento, la cual destruye, de manera gradual, la visión central del ojo, así como el detalle de las imágenes.
Un consumo regular de higos ayuda a prevenir y reducir, de manera significativa, la probabilidad de sufrir este problema. En ese sentido, se recomienda ingerir, al menos, de 2 a 3 porciones de higo al día.
Cuida del aparato respiratorio
La vitamina C presente en los higos, en compañía de la fibra y minerales como el zinc, convierten al higo en un aliado contra los catarros y procesos gripales.
Durante estos episodios, se produce mucosidad en exceso y bronquitis, dos síntomas que podemos combatir gracias al poder expectorante del higo, que ayuda a limpiar los pulmones, favoreciendo el buen estado del aparato respiratorio.